Acercándome al mundo angélico (parte 3)

Hemos abordado dos aspectos muy importantes que debemos trabajar en nosotros mismos para generar en nuestra vida un mayor nivel de consciencia que nos acerque más al mundo angélico. Recordemos entonces que el primer aspecto es "desear desde el corazón el encuentro con nuestros seres de luz", el segundo factor es "empezar a relacionarme conmigo mismo y con los demás desde la compasión".

Hoy vamos a revisar el tercer factor a tener en cuenta:

• Aprender a perdonar

Así es, debo tomar una actitud que me permita revisar situaciones, personas, experiencias que en algún momento de la vida me han generado emociones negativas que no he logrado soltar y que por el contrario se han venido convirtiendo en cargas para mi evolución personal.

Lo principal es abrir el corazón, aprender de cada experiencia y permitirte de esa manera sanar y alcanzar con ello la paz interior. Múltiples estudios han identificado que uno de los hábitos presentes en las personas que viven su vida con felicidad, es precisamente el hábito de perdonar y pedir perdón.

En últimas debemos entender que vinimos a vivir una vida cuyas experiencias van a ir marcando mi grado de evolución y conexión con el universo. Con esa perspectiva en mente, es claro que todo aquello que he vivido en mi camino y las personas con las que he interactuado, todas terminan siendo oportunidades de aprendizaje y crecimiento.

El aprender a perdonar no es un proceso fácil de empezar a aplicar, pero no estamos solos para alcanzarlo, puesto que el Arcángel Zadquiel está estrechamente asociado al don del perdón. Así que, ya debemos estar listos para perdonarnos a nosotros mismos y a los demás, para que ese manto de dolor, sufrimiento y odio dejen de opacar nuestra vida. Tengamos la plena confianza en que Zadquiel nos va a acompañar y finalmente logremos un estado de calma que nos empodere y nos llene de recursos emocionales y mentales para asumir con valentía y agradecimiento todo aquello que se nos presente en la vida.